TU VIDA CON BRACKETS. 5 TIPOS DE ALIMENTOS QUE CONVIENE REDUCIR SI LLEVAS BRACKETS
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Una ortodoncia es un tratamiento bucodental que corrige problemas de salud dental o mejoran considerablemente la estética de tu sonrisa. Darle la importancia que merece a tu sonrisa futura señala seguridad, fortaleza y disciplina, entre otras características positivas, a quien la lleva, por lo que sentimos orgullo de acompañarte en este camino.
Si de media dura entre 1 y 3 años, lo mejor es acostumbrarnos y adaptar nuestra dieta no sólo por comodidad, si no también para potenciar los mejores resultados del tratamiento. Para ayudarte en ello te vamos a detallar una lista de alimentos que debes tratar de reducir o modificar la forma de tomarlos en tu dieta.
1. Carnes Fibrosas. A no ser que se trate de ese maravilloso chuletón que se deshace en la boca, lo mejor es que adaptes la carne de ternera a formas como hamburguesa o albóndigas o bien, te rindas a las miles de recetas deliciosas que existen para preparar las carnes de pollo.
2. Alimentos Pegajosos. De alguna manera este tratamiento te ayuda a mejorar tus hábitos de alimentación ya que las golosinas, chicles, dulces con miel o mucha azúcar, incluso algún plato preparado con salsa espesa no son aptos para tu ortodoncia ni para tus dientes.
3. Alimentos ácidos o picantes. Vinagres, cítricos y comidas altamente picantes no son recomendables. En este caso porque durante el período de cicatrización de tu cavidad bucal puede aparecer incluso alguna llaga. Si tomas estos alimentos puede irritar, escocer y ser realmente molesto.
4. Alimentos crujientes. O lo que es lo mismo, duros. Pueden quedarse entre tus dientes y crear un mundo paralelo en tu boca difícil de destruir que retrasaría tu recuperación e incluso hacer saltar algún alambre de tu ortodoncia. Durante ésta etapa de tu vida busca siempre alimentos blandos para elaborar tus recetas o pedir a la carta fuera de casa. También puedes córtalos en trozos pequeños para su ingesta, en el caso de frutas, hortalizas o bocadillos.
5. Alimentos rugosos. Son estos alimentos con cierta textura chiclosa y fibrosa, como la corteza de algunos panes como el gallego o la pizza. Son difíciles para la mordedura y para alguna llaga que puedas tener, por lo que mejor es cortarlos en trocitos muy pequeños.
Última advertencia, nunca olvides guiarte de tu sentido común y tu propia experiencia, incorporando estos pequeños consejos eso sí, para que puedas disfrutar de lo que te gusta mientras cuida tu sonrisa.
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